Puerto Tirol celebró la primera noche del Chamamé
del Reencuentro con una interesante propuesta virtual. Este viernes comenzó el 17° Festival Nacional del Taninero y 10° Fiesta Provincial del Chamamé, emitida por la señal de Chaco TV, Canal 9 Link y sus plataformas en internet. Con una impecable producción, los más destacados artistas rindieron homenaje al Chamamé tras su declaración como Patrimonio de la Humanidad. Desde la organización destacaron el gran desafío que significó esta realización superando todas las limitaciones impuestas por este contexto de pandemia.
Fue una noche de homenajes y reconocimientos a quienes forjaron la tradición chamamecera y a quienes se propusieron superar las limitaciones y decir presente en estas tres noches extraordinarias. En la apertura se presentó la arpista Marta Carrara con un repertorio tradicional, recordó la cercanía con Paraguay y la identidad musical de esta gran nación chamamecera.
También los niños y jóvenes de la Escuela de Música Popular de la Fundación Huoqó pasaron por el escenario de esta fiesta trayendo su música y calidez en un espectáculo que podrá disfrutarse también en las noches del sábado y domingo. El Grupo Shenuken presentó su Chamamé del Fin del Mundo en un emotivo encuentro virtual desde Tierra del Fuego, desde donde recordaron al Chaco. Coqui Ortiz presentó un adelanto de su nuevo trabajo junto a Julio Ramírez en acordeón y Facundo Rodríguez en guitarra.
La Orquesta Comunitaria Cruce Viejo presentó un trabajo realizado de modo virtual, donde destacaron un mensaje que apela a la humanidad, algo los sostuvo en las dificultades del aislamiento en este contexto de pandemia y lo expresan con el tema “Yo vengo a ofrecer mi corazón” de Fito Páez. También reunieron a la orquesta por primera vez en el año, para grabar junto a Chango Spasiuk como invitado especial a la distancia, con la convicción de que quienes transitaron el 2020 puedan ser reconocidos y visibilizados en su totalidad en su espacio comunitario.
Otro encuentro virtual fue el de Chango Spasiuk y Renatto Borghetti que unió a Argentina y Brasil junto a Marcelo Dellamea como invitado especial, Daniel Sá en guitarra y Marcos Villalba en percusión, en un encuentro virtuoso de dos destacados acordeonistas que han sabido llenar su música de innovación sin renunciar a las tradiciones de su tierra.
También se sumaron a esta celebración Lucas Monzón Cuarteto. Desde Brasil Hermandades Chamameceras: Jakeline Sanfoneira – Gregorio Fronteira y Thauanne Castro. El grupoTajy presentó temas propios y un breve homenaje a grandes chamameceros. El talentoso Santiago Torres estuvo presente con un material grabado y Rocío Ayelén Acuña cautivó con su carisma y la potencia de su voz.
Uno de los momentos más destacados de la noche fue la vuelta a los escenarios de Mario Bofill, quien desde hace un año no realizaba actuaciones y que debido a la pandemia se hicieron cada vez más fuertes los rumores de su retiro. Sin embargo, tanto él como su hijo Chingoli, entre bromas manifestaron que continuarán compartiendo escenario y llevando sus historias a los miles de seguidores que no pierden la oportunidad de escucharlo cantar. Durante el festival, Mario Bofill fue nombrado Huésped de Honor por el gobierno de la provincia, galardón que recibió de manos de Jorge Capitanich y Hugo Sager.
El cierre estuvo a cargo de Los Hermanos Velázquez, reconocidos por sus más de seis décadas de trayectoria y su inmenso aporte al repertorio chamamcero. Francisco Velázquez celebró la «feliz idea» de los organizadores que le brindó la posibilidad de exponer su música y de acercarse al público mediante la virtualidad para poder celebrar una nueva edición de este festival y que el Chamamé ya es Patrimonio de Humanidad