Los pliegos de los embajadores de Alberto Fernández se tratan el jueves

El oficialismo logró dictamen favorable de la Comisión de Acuerdos del Senado para los doce pliegos de embajadores que fueron enviados al Congreso. El paquete de designaciones será tratado el próximo jueves desde el mediodía en sesión especial.

Los doces postulantes se hicieron presentes en el Salón Arturo Illia del Senado y expusieron ante los legisladores. En ese marco los únicos objetados fueron Carlos Raimundi que fue propuesto como representante ante la OEA y el ex Gobernador de Entre Ríos, Sergio Uribarri. El primero por su posición respecto de la situación en Venezuela, el segundo por estar afectado a una causa judicial que investiga un supuesto manejo irregular de fondos.

Más allá de la posición de Juntos por el Cambio, que en el recinto será más dura con Raimundi que con Uribarri, el Frente de Todos no tendrá problemas para aprobar los doce embajadores que fueron postulados por el Ejecutivo.

Los nombramientos aprobados por la Comisión que conduce la mendocina Anabel Fernández Sagasti fueron los de los embajadores ante Estados Unidos, Jorge Argüello; Brasil, Daniel Scioli; Israel, Sergio Urribarri; Perú, Carlos «Chacho» Alvarez; Bulgaria, Alfredo Atanasof; México, Carlos Tomada; Portugal, Rodolfo Gil; Uruguay, Alberto Irirbarne; Paraguay, Domingo Peppo; Mercosur, Mariano Kestelboim; y Unesco, Fernando Solanas.

En su exposición ante la Comisión, Raimundi en su rol de futuro embajador ratificó que se deben «favorecer todos los canales de diálogo» y rechazar «la intervención externa» en el caso Venezuela.

Raimundi explicó: «Tenemos que defender los valores que representan a la fuerza nacional y popular, que nos puso en este lugar, que son la autodeterminación de los pueblos, la defensa de los recursos naturales, la lucha para que la calidad de vida de los pueblos sea cada de vez más elevada. Esos son los valores políticos fundamentales».

También, ratificó que la Argentina «no va a reconocer como presidente de un país soberano a alguien que fue reconocido por otros estados pero no por ese país que dice representar».

Por su parte, el radical Naidenoff cuestionó «la negativa» de Raimundi «a responder si Venezuela es integrante o no de la OEA» y señaló que «hay 60 países que reconocen a Juan Guaidó como presidente de la Asamblea Nacional».

En el caso de Urribarri, dos senadores del PRO por Entre Ríos, el ex ruralista Alfredo De Angeli y Stella Maris Olalla, mencionaron las impugnaciones que el ex gobernador de la provincia recibió por estar afectado a una causa judicial en su contra por manejo irregular de fondos.

Urribarri respondió los cuestionamientos y dijo que estaría a disposición de la Justicia de la provincia las veces en que sea requerido para probar su inocencia.

En tanto, una de las figuras claves en la política exterior, Jorge Arguello, a la hora de exponer ante los senadores detalló: «Estuve en Washington hace unos días. Tuve la posibilidad de hablar con altos funcionarios del gobierno de Estados Unidos, con el Departamento de Comercio y el de Estado y del Pentágono». Además, Arguello explicó que también se reunió con los representantes del país norteamericano en el Fondo Monetario Internacional (FMI), que será uno de sus principales desafíos. «Me he encontrado una buena disposición para el privilegio de representar a la Argentina en Estados Unidos y los fueros internacionales», adelantó.

Sobre un encuentro entre Trump y Fernández, Argüello adelantó que está en etapa de preparación y que el encuentro podría darse en los próximos meses.

Por su parte, Iribarne dijo: «El desafío es seguir trabajando para que la historia en común se transforme en un proyecto en común, en un destino en común». «Una de las advertencias es que si aparecen diferencias, las conversemos, las superemos. Mucho menos profundizarlas», advirtió el candidato para la embajada en Uruguay, teniendo en cuenta el cambio de color político que tomará el país vecino cuando el Frente Amplio deje el Palacio Estévez y asuma el liberal Luis Lacalle Pou, el próximo primero de marzo.

Este proyecto apunta a restringir la participación de las grandes empresas en los supermercados para diversificar las góndolas y fomentar la competencia entre distintos productores. El efecto colateral de esa competencia debería ser una reducción de los costos, dado que se reduciría el margen de acción de los grandes grupos alimenticios sobre la cadena de comercialización.

Antes de la sesión convocada para las 12, se realizará la Sesión Preparatoria donde se  ratificarán las autoridades de la cámara.