Fernández y Massa se toman el café del acuerdo
En algún momento del día, en el famoso café pendiente, Alberto Fernández y Sergio Massa terminarán de formalizar el acuerdo por el que el Frente Renovador se sumará al armado de unidad del peronismo cuyo nombre todavía se terminaba de definir: Todos, Juntos, Con todos; son denominaciones que ya se usaron en algunas provincias y podrían ser reutilizadas a nivel nacional. Llamativamente, todavía no está determinado qué lugar ocupará Massa en las elecciones, cuestión para la que aún quedan diez días más de plazo. Esta medianoche es el cierre de la inscripción de alianzas y es un hecho que el FR se anotará junto al PJ, Unidad Ciudadana y aliados. “Le agradezco la generosidad de plantearnos la posibilidad de construir una coalición de partidos donde cada uno respete su individualidad”, expresó ayer Massa luego de recibir en sus oficinas a una delegación de dirigentes del peronismo encabezadas por su titular, José Luis Gioja, donde conversaron sobre la propuesta de 11 puntos que el líder del Frente Renovador envió a todos los candidatos.
El acuerdo se viene cocinando a fuego lento. Desde hace varios días que a la mañana se rumorea que ya está cerrado pero al terminar el día persisten las mismas dudas. Anoche, en el Instituto Patria, los negociadores de cada lado se volvían a reunir para terminar de pasar en limpio el consenso que hoy presentarán Alberto Fernández y Sergio Massa. En lo grueso, es lo que se viene trabajando en firme desde hace una semana: tres candidatos del FR entre los primeros 15 de la lista de diputados en Provincia, un legislador provincial por sección electoral, la seguridad de que los intendentes massistas no tendrán adversarios peronistas en sus municipios.
Lo que no termina de definirse es el lugar que ocupará Massa. Cuando ya parecía firme que encabezaría la lista en la Provincia con la chance de convertirse en el próximo presidente de la Cámara de Diputados, desde el FR reflotaron el reclamo para que compita en las PASO con Fernández-Fernández. En el Instituto Patria, a esta altura, no quieren escuchar hablar de esa posibilidad. La situación podría destrabarse si se llega a un acuerdo con respecto a la intendencia de Tigre. Massa quiere que la candidata sea su esposa Malena Galmarini pero el actual intendente, ex FR y hoy alineado en el peronismo, Julio Zamora, está moviendo cielo y tierra para mantenerse en el puesto. “Voy a trabajar para seguir transformando Tigre como los últimos seis años, y estoy dispuesto a competir para que la ciudadanía elija quien es el mejor hombre, o mujer, que representa nuestro espacio”, expresó en un comunicado. Zamora pretende que al menos le permitan competir en primarias, aunque la posibilidad se ve difícil si de eso depende el armado de la coalición.
Como Massa viene de participar de los encuentros de Alternativa Federal hasta hace unos días, ve importante que en su pase se resalte que detrás hay motivos programáticos y no meramente de conveniencia electoral. Por eso, el sábado distribuyó los 11 puntos con las políticas que plantea como base para armar una gran coalición que derrote al macrismo y ayer armó una reunión en sus oficinas para discutirlos con una delegación de dirigentes peronistas encabezados por Gioja entre los que destacaron dos gobernadores reelectos el domingo pasado: el tucumano Juan Manzur y el chubutense Mariano Arcioni. También estuvieron los intendentes Ariel Sujarchuk (Escobar), Gustavo Menéndez (Merlo), Leo Nardini (Malvinas) y Jorge Ferraresi (Avellaneda), los dirigentes sindicales Carlos Acuña (CGT), Antonio Caló (UOM) y Sergio Palazzo (Bancarios), más diputados como “Wado” De Pedro –negociador del acuerdo por parte del kirchnerismo– y Cristina Alvarez Rodríguez. Uno de los armadores del massismo, Diego Bossio, fue quien trabajó activamente para la organización del encuentro. “Con la unidad amplia que logramos, vamos a poner a la patria nuevamente de pie junto a todos y todas”, se entusiasmó Gioja a la salida.
Ayer por la noche pulían el texto que suscribirán hoy, al fin, Alberto Fernández y Massa. Luego quedarán otros diez días para resolver la espinosa cuestión de las candidaturas, pero el principal paso ya estará dado.