INICIÓ EL JUICIO DE LAS LIGAS AGRARIAS CON DERECHOS HUMANOS COMO QUERELLANTE
Segovia ratificó el acompañamiento del Estado familiares de las víctimas de los delitos cometidos durante el último terrorismo de Estado.
Este viernes inició la etapa oral del proceso en que se juzgará los homicidios de los dirigentes de Ligas Agrarias Raúl Gómez Estigarribia y Carlos Piccoli, muertos en supuestos enfrentamientos con fuerzas represivas, con 6 represores imputados. Es el quinto juicio oral y público por crímenes de lesa humanidad que se lleva adelante en la provincia del Chaco y es la causa llamada “Ligas Agrarias” en la que la Secretaría de Derechos Humanos nuevamente se constituye como querellante.
La secretaria de Derechos Humanos de la provincia Celeste Segovia expresó: “En esta causa se investigan hechos que se dieron en la última dictadura cívico – militar y que tuvieron que ver con ese plan no aislado, sino sistemático, que avanzó contra militantes de las Ligas Agrarias que ocurrieron en las ciudades de Villa Berthet, Corzuela, Villa Ángela y Sáenz Peña. Este es el quinto juicio de Lesa Humanidad, ya que primero empezamos por la causa Caballero I y II, luego Margarita Belen I y II”.
Están imputados, el ex teniente coronel de Ejército José Tadeo Bettoli, los agentes de policía Miguel Antonio Gonzáles, Carlos Chávez y Alcides Safenraiter, el comisario José Francisco Rodríguez Valiente y el comisario general Eduardo Wischnivetzky, casi todos con defensor público oficial y hoy se realizó el requerimiento de elevación a juicio.
La secretaria de Derechos Humanos Celeste Segovia se mostró más que optimista y afirmó que «desde nuestra Secretaría y por instrucciones del gobernador Domingo Peppo, estamos acompañando con nuestro programa de Atención y Asistencia a los familiares de las víctimas de los delitos cometidos durante el último terrorismo de Estado y esperamos tener una sentencia condenatoria antes de fin de año y obtener Justicia respecto a estos hechos que todavía nos duelen».
Los hechos investigados
Estigarribia, en su carácter de dirigente de ligas agrarias era intensamente buscado, el 12 de febrero dijo que lo visitaría a Iñiguez a las 21, y al avisar a la policía, Bettoli monta un operativo y debía dejar la luz prendida, y lo entretenga con dialogo, venia desarmado, y le hicieron una emboscada, y de los disparos pierde la vida, de calibre entre 9 y 11 mm que portaban la policía. En las constancias se certifica falsamente un accidente, no los disparos.
Carlos Piccoli por su activa participación como dirigente era buscado en 1975 por eso se exilió en España y en 1979 vuelve a la militancia, que consistía en el dialogo con pequeños productores y entrega de volantes, pidiendo la vuelta de la democracia. Un productor avisa de la vuelta de Piccoli y un día se trasladaba en bicicleta, por el cruce de Ramella, que une la ruta 95 y escuela 173 y es retenido por un retén policial armados con un fall y una pistola y le dispararon a mansalva, a corta distancia, asesinándolo.
Según la versión oficial, tanto Gómez Estigarribia como Piccoli fallecieron en enfrentamientos con fuerzas de seguridad, tal como quedó asentado en sumarios policiales que fueran incorporados a un expediente de la Justicia Federal de esa época. Pero la investigación y elevación a juicio presentada por el Ministerio Público incorpora una serie de indicios y pruebas que avalan ambos fueron emboscados y ejecutados.
Los imputados eran personal del Ejército Argentino y ocupaban las comisarías como lugares de detención, desde 1975 a 1979 se cometieron numerosas violaciones a los DDHH, que han afectadas al derecho a la vida y han dado muerte a muchas personas, los han detenido privando su libertad, los hacían dormían en el piso la comida les entregaban en una fuente y debían comer con la mano.