| |

EL GOBIERNO RECONOCIÓ A LA MESA INTERRELIGIOSA

CHACO POR SUS 11 AÑOS AL SERVICIO DE LA CIUDADANÍA.

Capitanich asistió a la oración por las fiestas de fin de año realizada en el Polideportivo Jaime Zapata. En el evento se oficializó la ampliación de la mesa que ahora tendrá 21 miembros, federalizando su composición. La Comisión Ejecutiva la renombró Mesa Interreligiosa del Chaco «Pastor Luis Macchi». El gobernador Jorge Capitanich participó, en la noche de este miércoles en el Polideportivo Jaime Zapata, del acto de ampliación de la Mesa Interreligiosa chaqueña, donde entregó una placa en reconocimiento por el trabajo de sus 11 años de historia aportando al bien común. Además, encabezó una oración en el marco de las fiestas de fin de año. Durante el acto entregó el decreto provincial N° 1797 por el cual se reconoce la nueva conformación de la Mesa Interreligiosa, que amplió la cantidad de miembros –ahora serán 21- y se incorporó a miembros del interior. Está integrada por la Iglesia Católica Apostólica Romana, la Comunidad Judía, la Comunidad Musulmana, la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa, la Iglesia Evangélica, la Iglesia Adventista del Séptimo Día, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (mormones), la Iglesia Evangélica Luterana, la Iglesia Evangélica de Comunidades Aborígenes, y también de miembros laicos de distintos credos.

La misma está abierta a la integración de las religiones que pretendan formar parte en el futuro. Además, la Comisión Ejecutiva de la Mesa tomó la decisión de renombrar su nombre a Mesa Interreligiosa del Chaco “Pastor Luis Macchi”, en honor a quien fuera coordinador del organismo desde 2009, fallecido el 28 de octubre del corriente año. “Fue un ciudadano preocupado y ocupado por legar a las generaciones futuras una Patria mejor, y por eso estuvo siempre tan presente y tan comprometido con todas las actividades de la mesa interreligiosa. Lo consideraba una parte fundamental de su vida y de su servicio como ciudadano y como hombre de Dios”, destacó el gobernador. La Mesa Interreligiosa Chaco es un espacio que permite el diálogo, la reflexión y el trabajo fraterno en forma conjunta a partir de las coincidencias entre los actores, con la finalidad de poder ayudar a la espiritualidad y la calidad de vida de la comunidad. Además, tiene como objeto promover la libertad religiosa y el respeto de los credos reconocidos en la provincia en una armónica convivencia común. El gobernador destacó que la nueva conformación de la mesa interreligiosa pretende tener amplitud y predica federal, lo que implica que en todos los rincones de la tierra chaqueña la manifestación de la fe se haga sentir. “La participación de la comunidad qom forma parte de esta expresión más profunda y federal”, consideró.

Por otro lado, Capitanich señaló que la pandemia nos debe sacar iguales o mejores, pero nunca peores. “En este tiempo de reflexión tenemos que hacer obras de misericordia espirituales y corporales, amando profundamente a nuestro prójimo, compartir el pan, el agua, vestimenta es también un acto de amor, como así también las obras espirituales como perdonar las injurias, enseñar al que no sabe, dar un buen consejo al que lo necesita”, sostuvo. Además remarcó que, en esta época, “donde la pandemia se llevó miles de vidas y causó mucho dolor, es importante reflexionar que el dolor forma parte de la vida humana, dicotomía que nos inspira en las acciones, en el sentido de la responsabilidad de estos tiempos que transitamos y que vendrán”. “Construir un mundo fraterno implica construir un mundo justo con verdad, justicia y amor”, aseguró y agradeció la posibilidad de compartir con la mesa interreligiosa de quien destacó la representatividad y su vocación de servicio.  

Diálogo fraterno desde la diversidad El director de Culto, Pedro García destacó que el objetivo de la Mesa Interreligiosa es tener un diálogo fraterno, respetando la diversidad y avanzar desde las coincidencias para crecer como entidades religiosas que trabajan por el bien común, por la paz y las unidades de las naciones. “Es importante que cada uno se pueda despojar un poco de su entidad religiosa, sin perder su identidad, para trabajar con otros credos, que quizás piensan diferentes, y articulando con el estado podamos colaborar en pos de una sociedad mejor”, expresó. Unidos en oración por un Chaco y un país mejor El sacerdote de la Iglesia Católica, Rafael del Blanco dedicó unas palabras al fundador de la mesa, Luis Maqui a quien ponderó como “una figura señera, digna y honorable”. El Pastor Daniel Gauna, miembro de la Iglesia Evangélica Metropolitana también lo definió como “un buen ciudadano en esta tierra, su legajo limpio quien y también fue un buen ciudadano de los cielos”. Posteriormente, al igual que sus pares, elevó una oración. Darío Rico, Pastor de iglesia de Jesucristo de los santos de los últimos días, enfocó su oración en el pedido de salud y bienestar para la Nación, los gobernantes de la provincia, los ciudadanos y, especialmente a los niños, las personas mayores y enfermas, a quienes trabajan en el área de seguridad, y medicamentos, y a los enfermeros. Rico hizo un llamado a “enfocar nuestros corazones en ayudar a los que más necesitan y a tener una mirada tierna hacia los que nos rodean”. El Pastor Qom Jorge Diego, de la Iglesia Evangélica oró por la Ciudad, la Provincia y la Nación en su lengua autóctona y agradeció, como miembro de la comunidad Qom, poder participar de la Mesa. De manera virtual, desde Egipto, la representante de la Comunidad Musulmana Marianela Rodríguez saludó a los presentes y oró “para que en el año que sigue pueda cambiar también la situación y sea una vida más digna”. Darío Giménez, miembro de la Mesa Evangélica del Interior se refirió al “privilegio” de haber sido convocados a la Mesa de la que participan referentes de diferentes credos y cultos de la provincia. “Tenemos una fe diferente, pero tenemos un camino a trazar que es poder a la luz de las escrituras intentar marcar un rumbo y fijar un dejar un legado la palabra de Dios y la Constitución nos habla de que él es nuestra fuente de razón y de justicia”. El rabino de la comunidad judía Natan Waingortin expresó que los vecinos judíos están “felices y agradecidos” de poder acompañar a los hermanos cristianos que en estos momentos están preparando para festejar la Navidad. “un momento fundamental e importante cargado de Esperanza, de luz, de sabores, melodías, recuerdos, colores e imágenes que lleva en lo más profundo del corazón los recuerdos de su tierna infancia”. Expresó un “profundo y sincero abrazo a toda la comunidad cristiana, católicos, evangélicos de todas las diversas congregaciones”.    

 
 
 

Publicaciones Similares