Pfizer pidió la autorización a Anmat para empezar a vacunar en la Argentina
El Reino Unido confirmó que “cumple con estrictos estándares de seguridad, calidad y eficacia»
Aunque el ministro de Salud, Ginés González García, no quiso adelantar la decisión de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología, dio por descontado que la vacuna en cuestión, que ya obtuvo la aprobación del Reino Unido, cumple con los requisitos necesarios para su homologación en el país.
El ministro de Salud, Ginés González García, confirmó este miércoles que Pfizer presentó la documentación a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) para solicitar la aprobación del uso de su vacuna en Argentina.
En diálogo con radio Rivadavia, Ginés sostuvo que «se presentó en el ANMAT Pfizer para autorizar la vacuna en la Argentina». «Si aprobó el Reino Unido tiene holgadamente todo lo que tiene que tener, pero no me quiero adelantar porque es una cuestión técnica», agregó el ministro.PUBLICIDAD
El Reino Unido se convirtió este miércoles en el primer país del mundo en aprobar la vacuna desarrollada por las farmacéuticas Pfizer (Estados Unidos) y BioNTech (Alemania). La MHRA (organismo equivalente a la Anmat en Argentina) informó que “cumple con estrictos estándares de seguridad, calidad y eficacia» y que las primeras 800 mil dosis serán distribuidas la semana que viene a adultos mayores y personal sanitario.
Además, se conoció que en los próximos días, ambas corporaciones buscarán la autorización por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés) para iniciar con la distribución y la aplicación a escala en EE.UU. En tanto, Europa, a través de la Agencia Europea del Medicamento, planea aprobarla el 29 de diciembre.
Vacuna y aplicación
La vacuna de Pfizer y BioNTech, que utiliza una tecnología nueva basada en el método “ARN mensajero” es segura. Así lo confirmó el especialista en vacunas e inmunólogo del instituto de La Jolla, Shane Crotty, al explicar que “las vacunas de ARN no generan ningún cambio permanente en el genoma ni en las células. Se usan para «cocinar» una proteína viral, que va a generar inmunidad, y luego se degradan”.
El esquema de las inoculaciones prevé dos dosis: entre la primera y su refuerzo deben mediar 21 días. Luego de la cuarta semana de vacunación se genera “una robusta respuesta inmunológica” y “altos niveles de anticuerpos”, destacó semanas atrás Alejandro Cané, jefe de asuntos científicos y médicos de la división de vacunas de Pfizer.
La principal ventaja de esta variante es que puede ser escalada con velocidad. En esta línea, de acuerdo a las anuncios de las empresas, esperan fabricar 50 millones de dosis de aquí a fin de año y 1300 millones en 2021.