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Saocom 1B: despegó el satélite argentino

La puesta en órbita se hizo desde Cabo Cañaveral.

A las 20:18 levantó vuelo, desde Cabo Cañaveral, el cohete Falcon 9 de la compañía Space X, en el que viajaba el satélite argentino más tecnológico. El lanzamiento había sido postergado durante varios meses por la pandemia y por cancelaciones de la empresa de Elon Musk.

Este domingo, luego de varias postergaciones, se realizó el lanzamiento del SAOCOM 1B, el satélite más avanzado con el sello Made in Argentina, que despegó abordo del cohete Falcon 9, de Space X, desde Cabo Cañaveral .

El Saocom 1B, hermano gemelo del lanzado en 2018, integrará la constelación Siasge con los cuatro Cosmo Skymed de la Agencia Espacial Italiana y entre sus objetivos está medir “la humedad del suelo y aplicaciones en emergencias como la detección de derrame de hidrocarburos en el mar”.

La Fuerza Aérea de los Estados Unidos, responsable de la base de Cabo Cañaveral, autorizó el lanzamiento del satélite Argentino de Observación Con Microondas (Saocom) 1B después de hacer «un nuevo análisis de factibilidad sobre las condiciones de oportunidad de lanzamiento». El evento fue transmitido en directo por el canal de Youtube de Presidencia de la Nación.

El lanzamiento estaba previsto para marzo, pero se pospuso por la pandemia de coronavirus para finales de julio, cuando la Comisión Nacional de de Actividades Espaciales (CONAE) informó que por decisión de la Fuerza Aérea de Estados Unidos la puesta en órbita del Saocom 1B había sido reprogramada para fines de agosto. 

En Cabo Cañaveral estuvieron los profesionales de Space X -la firma del magnate Elon Musk– junto a 13 ingenieros argentinos de la CONAE y de INVAP. En la Argentina se brindó soporte al lanzamiento desde Córdoba, Buenos Aires y Bariloche.

“Estamos muy contentos, todo está saliendo bien. Cada paso se viene sucediendo como fue planificado y estamos muy emocionados”, comentó Lucas Bruno, jefe de operaciones de CONAE.

Por su parte, Josefina Péres, jefa del proyecto SAOCOM 1B, aseguró que «fue un proyecto faraónico, con un trabajo de más de 20 años. Es todo un hito internacional y un éxito enorme para la Argentina”.

El presidente Alberto Fernández siguió el lanzamiento desde la Quinta de Olivos junto al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y se mostró orgulloso porque se logró poner en órbita el segundo satélite argentino. “Realmente estoy muy feliz y muy impactado. Argentina está dentro de los 10 países que están en condiciones de poner en órbita un satélite como éste”, aseguró el mandatario.

Y agregó: “Lo que me enorgullece es que esto es posible gracias a científicas y científicos argentinos, muchos de ellos salidos de la universidad pública. Démonos cuenta de la importancia de que el Estado invierta en Ciencia y Tecnología, y no olvidemos que la ciencia alguna vez había dejado de ser ministerio”. “Felicidades argentinos, hoy somos un poco mejor que antes”, aseveró.

SAOCOM 1B

Con el lanzamiento del SAOCOM 1B, la Argentina completó la Misión SAOCOM. El proyecto fue pensado para ofrecer soluciones a problemáticas locales no satisfechas con información de otros satélites, a partir de requerimientos hechos por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y el Instituto Nacional del Agua (INA) con el objetivo de atender necesidades de los sectores productivos y la gestión de emergencias naturales y catástrofes.

Raúl Kulichevsky, director de la CONAE, señaló que «existen muy pocos satélites con una antena radar en Banda L, como la de los Saocom», compuesta por siete paneles que están formados por un conjunto de 20 miniantenas. Estas características hacen que los satélites SAOCOM sean especialmente útiles para prevenir, monitorear, mitigar y evaluar catástrofes naturales o antrópicas.

El ingeniero explicó que con el Saocom «no sólo podemos tener imágenes de la superficie, sino de lo que está por debajo hasta dos metros de profundidad de acuerdo a las condiciones del suelo». Las imágenes de ambos satélites brindarán información sobre los niveles de agua del suelo y permitirán obtener datos sobre la presencia de buques en zonas de jurisdicción argentina o detección de derrame de hidrocarburos en el mar.

En su posición final, el satélite se encontrará a unos 600 km de altura y a 180 grados de distancia del Saocom 1A, lo que permitirá una mayor frecuencia de revisita. Recorrerá cada órbita en 88 minutos, tomará 225 imágenes diarias pasando sobre ambos polos terrestres.

Tanto el Saocom 1B y el 1A son el quinto y el sexto, respectivamente, satélite de observación de la tierra de la Conae. Ambos fueron desarrollados y fabricados por esta Comisión en conjunto con las empresas VENG e Invap, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), el laboratorio GEMA de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y unas 80 empresas del sector espacial nacional.

Con esta misión satelital nacional, el país se posiciona en un selecto grupo de países capaces de desarrollar la tecnología radar para uso espacial.

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