El Frente de Todos planea armar un centro de cómputos propio 

Desde el Frente de Todos (FdT) volvieron a advertir que existe  “riesgo de la manipulación del resultado de las PASO” del próximo domingo, al tiempo que afirmaron que buscarán garantizar con la fiscalización propia “que el proceso del escrutinio provisorio sea lo más transparente posible y que refleje en tiempo y forma lo que sucedió con las urnas”. Para la oposición, sobran motivos para sospechar: el cambio del método de la transmisión de los resultados desde los lugares de votación al centro de cómputos oficial, que ahora realizará de forma “electrónica” la empresa Smartmatic contratada por el Gobierno, cuyo software que debería estar disponible 30 días antes de la elección para poder ser auditado por los peritos informáticos de los partidos que participan de la elección, aún se desconoce a  menos de una semana para los comicios y la compañía de origen venezolano con sede en el Reino Unido no lo cedería aludiendo “cuestiones de seguridad”. Además de las dos fallidas experiencias piloto: una sin la auditoría de los partidos políticos y otra con innumerables “inconsistencias” (fallas) y con actas fechadas con anterioridad a la última prueba. Para el Gobierno, en cambio, nada de esto es posible pese a los incumplimientos y falta de controles externos. El ministro de Interior, Rogelio Frigerio, acusó a la oposición de “irresponsable” por “generar incertidumbre sobre la transparencia del escrutinio” antes de las elecciones primarias.

La Justicia Electoral emitió un dictamen la semana pasada en el que le da la razón en parte a los reclamos presentados por distintos partidos opositores. Pero no se expidió sobre el sistema operativo del escrutinio provisorio, ya que considera que el “escrutinio definitivo” –que está a cargo de la Justicia Electoral– es el único válido.

Ayer se sumó una resolución del juez que subroga el juzgado federal con competencia electoral en territorio bonaerense, Adolfo Gabino Ziulu, que dispuso “la presencia de un fiscal por cada lista en el interior del aula o recinto desde el que se efectúe esa transmisión, a fin de que verifique las operaciones”. Aunque –agrega– “el fiscal designado no podrá tomar contacto físico con el telegrama, debiendo limitarse a su visualización”.

Pero nada de eso despeja las dudas opositoras. “Encontramos que el telegrama que se escanearía en la escuela sale con un formato y llega al centro de cómputos con otro, de Tiff a PDF, y es ese componente intermedio donde puede pasar cualquier cosa”, señaló a PáginaI12 el experto informático Eliseo Zurdo, que forma parte del grupo de fiscalización electrónica del FdT y agregó que “lo que podría ser un error natural ahora puede ser un hecho intencional”. “Los representantes del gobierno repiten que este sistema es más rápido, algo que no pide ni la Constitución, ni la ley electoral, sin dar respuestas a las fallas de seguridad que denunciamos”, remarcó Zurdo.

A pesar que la Justicia y los partidos podrían controlar el resultado real de la votación recién en el escrutinio definitivo, para el FdT la sospecha es que se pretenda instalar un resultado que no refleje el que determinó la ciudadanía con su voto. “En la Argentina hay mucha gente que vota al ganador, entonces ellos (por el oficialismo) están aspirando a meter en la cabeza de la gente, por equis tiempo, que ganaron”, consideró al respecto el candidato presidencial del Frente de Todos, Alberto Fernández, en declaraciones radiales. “Las fallas con Smartmatic son tremendas y todo eso huele mal”, sostuvo Fernández y agregó: “Nunca hubo problemas de fraude con nuestro sistema. No se entiende por qué lo cambian”.

“Hay que tener muchísimo cuidado por la manipulación, que es un hecho que se puede dar con Smartmatic y, obviamente, con los medios de comunicación más hegemónicos que trabajan en sintonía con el presidente de la Nación”, sumó el jede del bloque de diputados del FpV-PJ, Agustín Rossi, en declaraciones a FM La Patriada. El diputado recordó que en las PASO de 2017 “el Gobierno trató de instalar que habían ganado en todo el país y la verdad es que perdieron en la provincia de Buenos Aires y en Santa Fe”. “Como ya la hicieron en 2017, la manipulación la van a volver a hacer”, sentenció.

Sin respuesta y con las elecciones a cinco días, el FdT apuesta a su propia fiscalización. “Toda la vida armamos un centro paralelo porque, si no, la fórmula presidencial y la fuerza política se mueve a tientas, exclusivamente con la información oficial. Vamos a buscar información de cada una de las provincias a través de nuestros propios fiscales y, con eso, vamos a tener idea de dónde estamos parados esa misma noche”, afirmó el apoderado nacional del PJ, Jorge Landau.