Vandalismo absoluto en una escuela de Villa San Martín
Esta desagradable situación vivieron Rosana Zampa, directora de la EEP 336 Enrique Banchs, junto al equipo de docentes esta mañana. Al ingresar se encontraron con puertas y ventans de vidrios totalmenet destrozads, armarios destruídos, “incluso sacaron una caja del piso tecnológico”, indicó Rosana en estado de angustia e impotencia.
Zampa sostuvo incluso que “fueron muchos los reclamos, tanto al Ministerio de Educación, como al Ministerio de Infraestructura, para la instalación de cerraduras y rejas, algo que jamás llegó. Nos decían que todo era por etapas”, relató la directora, asegurando que “la etapa para ellos era una prolongación de la cocina, trabajo que incluso quedó sin terminar”.
El destrozo fue absoluto. “Aunque no robaron nada”, contó Rosana, ya que “al no tener cerraduras, ya no dejamos nada de valor ni en las aulas ni en los armarios”, sostuvo la docente.
“Este es un escenario tristísimo, porque dimos el aviso sobre la necesidad de contar con mayor seguridad de nuestras instalaciones, y de las áreas correspondientes no nos escuchraon”, lamentó Zampa, quien aseguró que “hoy recién prometieron venir del Infraestructura, espero que lo hagan y vean lo que duele que te destruyan lo poco que uno puede hacer y tener. Algo que con muy poco se pudo haber evitado”.
Cabe recordar que la EEP 336 Enrique Banchs, ubicada en Monteagudo 1201, de Villa San Martín alberga a 465 chicos, a quienes les dan los servicios de refrigerio y almuerzo.
Los delicnuentes ingresaron rompiendo vidrios de puertas principales y en cada una de las 14 aulas. Además rompieron las puertas de vidrio de Direccción y de la cocina, aunque en eos lugares no pudieron ingresar, ya que ambas habitaciones cuentan con rejas. “Si estos lugares no tuvieran rejas, la pérdida hubiera sido peor”, aseguró Zampa.
Hoy, las clases se desarrollan con normalidad, ya que “cada niño cuenta con su refrigerio y su almuerzo, un derecho que no se les puede negar”, señaló Rosana.
El equipo docente espera ahora que sus reclamos puedan ser oídos y que las soluciones lleguen antes de lamentar un próxima vandalismo.
Fuente: NORTE