Racing goleó 3-0 a Godoy Cruz en el Cilindro y volvió a la punta Pelea la corona con el Halcón
Racing volvió a la punta junto a Defensa luego de vencer 3-0 a Godoy Cruz en el Cilindro de Avellaneda, en el cierre de la fecha 19ª de la Superliga. Lisandro López –máximo artillero del certamen con 15 goles– y un doblete de Matías Zaracho le dieron el triunfo al local, que enfrenta una semana decisiva con el clásico de visitante la próxima fecha ante Independiente y la revancha con Corinthians por la Copa Sudamericana.
Racing rendía ayer una prueba de fuego porque la dolorosa caída ante River, que incluyó el conflicto surgido entre Chacho Coudet y Ricardo Centurión, sumado al avance imparable del sorprendente Defensa, el único invicto, lo hacía mirar la cima desde abajo. Godoy Cruz, por su parte, aún busca la identidad que pretende darle Marcelo Gómez, su nuevo entrenador.
En la primera etapa, el dominio de Racing fue abrumador. Godoy Cruz sólo procuraba frenar al rival como sea y a los 9 minutos Cvitanich –la figura del partido– cayó en el área por un agarrón de Aleo, pero Lamolina dejó seguir. Poco después Saravia tuvo su chance, que el arquero Ramírez logró despejar. El gol llegaría casi a la media hora y a partir de un saque lateral: la pelota fue controlada por Cvitanich, quien de memoria asistió a Licha López para que el capitán, con clase, marque el primero. En la réplica, Arias evitó dos veces el empate del Tomba tras los remates primero de Barboza y luego del Morro García. Pero la Academia engrosó la cuenta cuando Zaracho, ante una desarticulada defensa visitante, clavó el segundo. Y pese a que Angel González volvía a probar los buenos reflejos de Arias, eran tantas las facilidades que ofrecía el conjunto mendocino que resultó extraño que Racing se fuera al descanso sin haber convertido un tanto más.
En el complemento, el Tomba salió con otra predisposición y el Morro García casi descuenta. Pero el que volvería a gritar sería Zaracho, tras otra gran asistencia de Cvitanich. Racing fue contundente, ganó bien, recuperó la punta del campeonato y la mitad de Avellaneda sueña con la corona.
