Macri reconoció errores en elacto por el Día de la Independencia en Tucumán «Estamos pasando por una tormenta»
Tras desistir del desfile militar en la Ciudad de Buenos Aires debido al malestar en las Fuerzas Armadas en desacuerdo con el aumento salarial, el presidente Mauricio Macri llegó esta mañana a Tucumán para encabezar el acto por el Día de la Independencia. El jefe de Estado arribó a la histórica Casa de Tucumán acompañado por la Primera Dama, Juliana Awada; la vicepresidenta, Gabriela Michetti; el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el gobernador local, Juan Manzur. Tras su paso por la Casa de Tucumán, brindó un discurso en el que señaló que «hay obstáculos pero corregimos los errores». Y volvió a decir que busca un «país con equidad y transparencia».
No participó del tedeum en la Catedral de Tucumán. La vicepresidenta Gabriela Michetti y el gobernador de Tucumán, Juan Manzur, asistieron a la ceremonia. Durante la homilía, el padre Carlos Sánchez, tuvo duros conceptos contra la legalización del aborto.
Macri reconoció la crisis que desató la corrida cambiaria, pero para explicar su origen, volvió a recurrir a metáforas climáticas. “Estamos pasando por una tormenta. “Estamos pasando una tormenta fruto de muchas circunstancias. Entre ellas hay temas de nuestra propia gestión, de los mercados externos y de las políticas tomadas por gobiernos anteriores. Pero debemos tener confianza porque sabemos a dónde vamos y cómo vamos a lograr las metas que nos hemos impuesto», aseveró.Es importante entender que pueden variar los factores, así como varía el clima de la navegación, pero el rumbo del barco está claro y sigue siendo el mismo”, afirmó luego de pedirles a los argentinos un mayor sacrificio. Es la primera vez que Macri reconoce a su «propia gestión» como causa de la crisis que sacude su gobierno.
En esa línea, fomentó nuevamente el emprendedurismo y la meritocracia. Calificó al suyo como un “gobierno federal que impulsa el desarrollo de forma integral” y luego aclaró que lo “hace a través de un plan orientado a generar más empleo privado para los argentinos, estimulando su creatividad y su libertad”.
“Sigamos construyendo juntos esa Argentina distinta, normal, predecible equitativa”, se entusiasmó. Más tarde, hizo un particular diagnóstico sobre su gestión, al afirmar que “el cambio está empezando a producir resultados”.
“No es solo una expresión de deseo”, afirmó el Presidente. “Necesitamos impulsar nuestros talentos, apostar a todo lo que podemos lograr como lo hacen los emprendedores y también los que conducen las pymes”, insistió haciendo referencia a uno de los sectores más castigados por su política económica. Pese a ello, las calificó como “un motor que recorre la Argentina llevando sueños adelante”.
Por último, envió un mensaje a los políticos y a los empresarios. “Superemos esa tendencia que tienen algunos de siempre ver cómo las cosas pueden salir mal, tanto mejor ser optimistas con un futuro que está ya empezando a surgir”, afirmó.