El Gobierno no dará marcha atrás con la quita de las retenciones
«Las retenciones no se tocan», aseguró el presidente Mauricio Macri reunido en su despacho con los referentes de la Mesa de Enlace y mantuvo firme una de sus promesas de campaña y su alianza con el sector agroindustrial, a pesar de que en los últimos meses retaceó liquidar los dólares de la cosecha y sumó varios porotos a la crisis que llevó al Gobierno a recurrir al Fondo Monetario Internacional. En la reunión, Macri estuvo junto al ministro de Agroindustria y ex titular de la Sociedad Rural, Miguel Etchevehere.
Hasta la Casa Rosada llegaron Carlos Iannizzotto (Coninagro), Omar Príncipe (Federación Agraria Argentina), Dardo Chiesa (Confederaciones Rurales Argentinas), y Daniel Pelegrina (Sociedad Rural Argentina) con la preocupación de las versiones que indicaban que el Gobierno nacional revisaría el beneficio que les otorgó como promesa de campaña y cumplió a solo 4 días de asumir en el Poder Ejecutivo. Desde la llegada de Cambiemos, los productores agropecuarios pagan 0 por ciento retenciones para las exportaciones de maíz y trigo, mientras que las retenciones de soja se reducen un 0,5 por ciento cada mes, lo que actualmente las ubica en el 27 por ciento.
La necesidad del Gobierno de ajustar las cuentas fiscales para cumplir con las pautas acordadas con el FMI despertó el rumor de que esa política sería revisada, pero Macri lo descartó de plano este mediodía. «El Presidente ratificó el rumbo, dijo que no hay ningún cambio y que el cronograma sigue tal cual está», celebró Dardo Chiesa de la CRA, tras finalizar la reunión.
Los rumores comenzaron a correr después de que el Gobierno decidiera volver al FMI para solicitar un acuerdo «stand by» que le diera los fondos necesarios para hacer frente a la corrida del dólar que se aceleró desde principios de mayo. La baja liquidación de granos por parte del sector agropecuario fue uno de los motivos que debilitó las posibilidades del BCRA de hacer frente a la corrida.
A pesar de que Cambiemos benefició al campo con la quita de retenciones y elevó las restricciones para la liquidación de la cosecha, con la esperanza de que los dólares fluyeran hacia las arcas del Banco Central, en abril pasado, antes de la corrida de mayo que llevó a buscar el salvataje del FMI, el campo registró una de las liquidaciones de granos más bajas de la última década, según informes del sector.
En plena corrida fue la aliada estrella del Gobierno, la diputada Elisa Carrió la que se encargó de retar a los socios del campo: «Nosotros acompañamos al campo en los momentos difíciles; bajamos las retenciones; la sociedad acompañó. Ahora les digo a ellos: no retengan la soja; empiecen a liquidar para que ingresen divisas».
A pesar de los idas y vueltas, el mandatario decidió hoy mantener la alianza con el sector agropecuario y ratificó que el Estado continuará resignando recaudar con las exportaciones de cereales para alcanzar el prometido equilibrio fiscal.
La semana pasada, el Gobierno sí optó por ajustar con los trabajadores de la agricultura familiar al decretar que desde el 1 de enero de 2019, unos 100 mil pequeños productores, dejarán de recibir el beneficio del monotributo social. El beneficio que permitió a los pequeños productores a acceder a seguridad social y jubilación sufrirá a partir del año que viene un ajuste del 25 por ciento de aportes por parte del Estado, que pasará de pagar el total de las cargas al 75 por ciento.